Corría el año de gracia de 1980, cuando se celebró en Madrid
por primera vez y en el recinto Ferial de la Casa de Campo de Madrid la Feria
Internacional de Turismo (FITUR).
Y como no, tratándose de turismo me lo iba a perder. Y
andando llegué al stand de Canarias, donde a los visitantes nos enseñaban a
liar puros y a hacer un postre con plátanos.
Como por entonces no había folletos, memoricé la receta y al
llegar a casa me faltó tiempo para llevarla a la práctica, y hasta la fecha.
Contaba yo con 19 años y supongo que la receta actual se
parecerá más a mis gustos e inquietudes culinarias que a lo mostrado en el
stand.
He de decir que es una receta muy agradecida, por que se
presta a darle salida a esos solitarios plátanos que van cambiando de aspecto y
sin embargo por dentro están bien, pero que se ven relegados.
Os pongo la receta sin cantidades, al gusto.
Ingredientes:
- Plátanos
- Cacao
- Ron ( o cualquier licor)
- Almendras
- Naranjas (cuando no tengo pongo kiwi)
- Barquillos para adornar o similar.
Elaboración:
Machacamos en el mortero las almendras y las dejamos macerar con el ron, si lo vais a hacer para niños cambiar el ron por zumo de
naranja por ejemplo.
Pelar y triturar los plátanos. Añadir el cacao y mezclar con
movimientos envolventes y añadir el ron
con la almendra.
Vaciamos en copas y dejamos enfriar en la nevera.
Antes de servir, adornar con el barquillo y un gajo de
naranja pelada. En mi caso no tenia ni uno ni lo otro y lo he sustituido por media
galleta de los helados al corte y una rodaja de kiwi.
Y la sorpresa al servirlo es que es un plátano camuflado, ya
que por el aspecto parece chocolate, pero el saber nos da la pista.
Y de paso le damos salida a esos plátanos prepochos que
estaban abocados a acabar en el cubo de la basura.
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